ISH

Impuesto Sobre Hospedaje, implementado en México hacia finales de los 90´s, es un cobro que se le hace al turista y es trasladado por el empresario de hospedaje al gobierno estatal con la finalidad de promocionar el destino y oscila entre el 2% y 5% de acuerdo con las legislaciones de cada entidad federativa. 

Y aunque este es el “debe ser” la realidad es muy distinta y parte desde dos principios:

1. Algunos expertos afirman que 1 de cada 3 pesos recaudados por el ISH no se utiliza para la promoción turística 

2. La falta de piso parejo en el cobro a todos los establecimientos de hospedaje.

Si bien la semana pasada hablábamos sobre casos exitosos en el país en la utilización de este recurso, también existen algunos otros donde apenas se regresa un porcentaje mínimo a la promoción, o peor aún, ni siquiera se sabe el paradero de este recurso. 

Adicional a ello y por la falta de legislación o voluntad política, no existe manera de regular todos los sitios de hospedaje, comenzando con los dados de alta en las plataformas como Airbnb, lo cual genera una profunda desigualdad, empezando desde que estos establecimientos se ven beneficiados de la promoción que se pueda llegar a generar, pero no aportan a ella. 

Entonces estos dos factores, importantes y relevantes vuelven a un más complicada la promoción de un destino, al no tener la recaudación suficiente para este propósito y el poco recurso que se tiene se destina a otros objetivos. 

La promoción siempre ha sido esencial para un destino, fue por eso por lo que se creó  y adoptó tan bien este nuevo impuesto, sin embargo, debemos de invitar a todos los estados a utilizarlo de la mejor manera, simplemente pues al aumentar la promoción, aumentará la visita de turistas y por ende habrá una mayor recaudación. 

Y en cuanto a la falta de voluntad política para la regulación de los servicios de hospedaje, tenemos que hacer la gran acotación, en este caso no solo hablamos de un tema recaudatorio, sino también de un tema de seguridad para el visitante, para el destino y sus inversiones.

Pero ese es otro gran tema

En fin, hay Turismo pa´rato, hay charla pa´rato…

Nos leemos pronto.