En 1976, Felipe Cazals recibió el Oso de Plata en el Festival Internacional de Cine de Berlín, por su película Canoa. Este año, regresa a presentar nuevamente el filme, sólo que en esta ocasión dentro de la sección Berlinale Classics, que reúne las versiones remasterizadas de obras consideradas actualmente de culto.
En entrevista, el director comparte sus emociones al regresar al prestigiado encuentro, pero sobre todo por la oportunidad de que las nuevas generaciones puedan apreciar la película en formatos como DVD y Blu-ray.
A más de 40 años, ¿qué representa regresar a la Berlinale, ahora que su película es considerada un clásico del cine mundial?
Es una gran satisfacción que, lamentablemente, no puedo compartir con quienes hicimos la película, muy especialmente el guionista Tomás Pérez Turrent y el cinefotógrafo Álex Phillips Jr. No excluyo a muchos de los actores y técnicos que tampoco ya están, pero sí destaco a estos dos personajes fundamentales para Canoa, quienes me gustaría que estuvieran presentes en esta nueva exhibición de nuestra película, filmada hace 41 años.
¿Cómo fue la recepción del público de la Berlinale en 1976 y cómo espera que sea ahora?
Cuando la película ganó el Oso de Plata en Berlín, mi principal impresión fue que el público presente estaba sorprendido, y casi un poco ‘shockeado’, por el tema y violencia de la película. En esos años existían otras condiciones políticas en Europa, como la inmediatez de la Segunda Guerra Mundial, y lo que menos se podían imaginar es que México iba a presentar una película tan brutal y visceral con respecto a un comportamiento político nocivo en México.
La película tuvo sus defensores y detractores pero, al final de cuentas, en el jurado decidieron darle el Premio Especial del Jurado. De inmediato regrese a México y no supe más.
La película fue restaurada digitalmente por The Criterion Collection…
Desde hace cinco años, gracias a la tenacidad y empeño de Alfonso Cuarón, con Criterion y apoyo de Imcine (Instituto Mexicano de Cinematografía), la película está en tratamiento de recuperación y restauración para presentarse bajo una nueva luz totalmente distinta, para un mercado mundial.
La restauración fue profesional, habría que marcar que no sólo es un proceso tecnológico, también es artístico porque junto a la restauración viene una larga conversación con Alfonso Cuarón, viene una presentación de Guillermo del Toro y viene toda una suerte de información sobre lo que Canoa significa dentro de la historia del cine mexicano y dentro de la historia política de México.
Esa tradición de Criterion, que es lo excelso, es un hit que a mí me tiene muy satisfecho.
¿Qué piensa de que las nuevas generaciones podrán ver su película en DVD y Blu-ray?
Eso es lo que más me interesa. Yo quisiera después de Berlín hablar poco y esperar las opiniones de las nuevas generaciones, a ver qué similitud hay con las de 1976, cuando la película salió, y a ver qué tanto han perdurado las virtudes de la película. O qué visión distinta no sólo hay en México, sino las voces latinoamericanas con respecto al cine mexicano.
El cine mexicano tiene una perdurabilidad indiscutible, esto al margen de su género. No importa si es cómico, musical, melodramático o simplemente y sencillamente de expresión autoral. El cine mexicano es una pieza importantísima de la cultura latinoamericana y es ahora la ocasión de saber si Canoa pertenece a esa tradición.